Hay una divinidad que forja nuestros fines, por mucho que queramos alterarlos
Duda que sean fuego las estrellas, duda que el sol se mueva, duda que la verdad sea mentira, pero no dudes jamás de que te amo.
Si no recuerdas la más ligera locura en que el amor te hizo caer, no has amado.
Preciso es encontrar lo infinitamente grande en lo infinitamente pequeño para sentir la presencia de Dios
En nuestros locos intentos, renunciamos a lo que somos por lo que esperamos ser
En realidad no nos hacen sufrir las cosas, lo que nos hace sufrir son las ideas que tenemos acerca de las cosas
Sabemos lo que somos, pero no en lo que podemos convertirnos
Nunca hay pecado en seguir la propia vocación
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